martes, 9 de agosto de 2016

Trabajos de los alumnos de 2do 8va. II parte

Durante el mes de agosto comenzamos a trabajar con la novela de Jack London, Colmillo blanco, uno de nuestros primeros trabajos de escritura nos invitó a pensar y repensar los espacios naturales en los que la mente viaje de modos distintos:

'Pantano' por Quimey Fusaro Fortete

Transita lentamente un hombre agotado por las fangosas orillas de una laguna pantanosa. El fuerte ruido de los grillos predomina tanto en el ambiente como en la cabeza de la persona. Un intenso dolor de piernas llega para cortar aquella caminata y hacer que caiga de rodillas para quedarse pequeño ante los grandes árboles que, como montañas, surcan el cielo. Tras unos instantes aquel ser logra difícilmente incorporarse para continuar. Grandes hojas se alzan en lo que parece ser un enorme prado de vegetación que se extiende hasta lo inalcanzable para la vista. Al caer la noche, una enorme sensación de vacío se apodera del lugar, tan grande que hasta hace echar de menos a la más pequeña criatura que observaste recientemente. Tras luchar de forma intensa con la oscura noche, sale el sol con la promesa de que un nuevo y hermoso día comenzará...


‘Recuerdo secreto’ por Milagros Orué

Mientras caminás por un puente que no mide más de unas cuadras, ubicado en una zona muy
remota del Paraguay sentís algo que es comparable a comer chocolate o estar acostado sobre el pecho del ser que te trasmite paz. El fino canto de las especies más extrañas y brillantes hace que el ambiente, la atmósfera y la luz cambien completamente. Ese aire puro limpia hasta el mas mínimo rastro de carbono de los pulmones, es la luz quien le da ese detalle que enamora al más frío y cautiva al más ciego de los seres, como la sonrisa de un niño luego de un mal día. La persona que camina por aquel sendero se siente viva y afortunada de estarlo. Cuando aparece alguna especie de animal ves la tranquilidad que alumbra sus ojos. De niña comentaba lo lindo que era el Paraguay, pero jamás volví a contar lo perfecto que era ese lugar.


Uno de nuestros últimos ejercicios de escritura consistió en buscar un espacio, eje de una escena, donde ocurrieran a su vez otras microescenas o micro-relatos: 


'Parque Patricios' 
por Claudia Carballo

Sábado 6 de Agosto, 15:35 PM.
Ubicación exacta: Monteagudo y Av. Caseros

El día está soleado. Mucha gente viene divertirse, a recorrer la feria. En la esquina principal del parque siempre hay un grupo de personas mayores y adolescentes bailando tango. Junto a ellos, el carro de pochoclos. Detrás, la salida del subte por donde siempre fluye mucha gente. A su lado, podemos ver un escenario donde se realizan espectáculos para todo público. Al fondo del parque, hay una cancha de básquet, y, en diagonal, vemos un espacio donde no hay nada en particular, es bastante amplio, allí, los chicos del barrio realizan un torneo fútbol. Compiten y el ganador obtiene una salida gratis entre amigos.

También en el fondo, hay un sector para hacer ejercicios: siempre van allí las personas mayores de 30, casi nunca se ve alguien más joven ahí. De vez en cuando delante del escenario hay puestos de comidas excéntricas. En estas últimas semanas vino mucha gente y los puestos hicieron buena ganancia.-


'Retiro' por Abigaíl González

RETIRO: es un lugar bastante grande, es un día soleado, en ese lugar se pueden hacer variedades de cosas diferentes. Por ejemplo, hay un chico que está con su familia comprando unos dulces, ya que su familia tiene hambre. Muchas personas están en una fila para cargar la SUBE. Otras sólo salen del tren. Algunos también esperan que llegue el tren. Otra gente solo va a robar a ese lugar. Muchos venden sus mercancías. A veces hay parejas o familiares que discuten y abarcan toda la atención de la gente. La mayoría de las personas sólo camina. Además, como está el juego de Pokemon-go, pueden estar jugándolo. La mayoría está atenta a su celular. También pueden estar escuchando música con sus auriculares. Algunas personas están llamando por su celular o teléfono público. Hay indigentes que están con sus maletas, llegando de un viaje parece. Algunos sacan el boleto para viajar. Otros están en unos restaurantes o locales para comer. Los que bajan del tren vienen de visita o para pasar el rato.


'Pétalos de cerezo' por Luz Chaile

El clima: Templado. Ni tan caluroso ni tan frío; estable. 
El color naranja rojizo abarcaba el atardecer.
Es un día de primavera-otoño y cayendo están las hojas de los cerezos, cada pétalo cae a cinco milímetro del anterior.
Este es el primer atardecer que veo en una plaza de Japón. Es hermoso.
Algunos niños juegan en la caja de arena, hacen castillos sin importar cuantas veces tengan que volver a crearlos. Al llegar a casa, toman un baño antes de comer. 
Otro niño pequeño con sus padres o hermanos se resbala por el tobogán, una y otra vez,  con la confianza de que sus mayores estarán ahí para atraparlo.

Un niño y una niña en los columpios, se hamacan lo más fuerte que pueden. Para sentir el viento en la cara. Sentir que vuelan. 
Adolescente toman un helado y ríen una y otra vez. 
Por detrás hay más personas, ellos están uniformados. Quizá hayan salido de la escuela y se dirigen a casa propia o de uno de sus amigos. Los veo separarse de una esquina. Dos van juntos y uno solo. 
Pasó más de media hora y el sol ya no está. La temperatura bajó un poco. Las personas que anteriormente estaban en la plaza ahora ya no están.
Sólo quedamos una chica y yo. Ella esta en el columpio. Parece estar triste. Mejor dicho, a esta horas de la noche la tristeza viene a esta plaza.



‘Hogar’ por Milagros Orué

Hogar dulce hogar, qué mejor lugar para contar pequeñas historias que una familia. En una casa no tan grande ni tan chica de clase media se reúnen en una fiesta de cumpleaños. Mientras la madre y la abuela intentan que los niños no entren a la cocina y los invitados estén bien atendidos, el patriarca de la casa se encarga de la música y el pelotero en el patio. En el transcurso de la fiesta, el adolescente incomprendido está en un rincón de su habitación ignorando el festejo que sigue en la planta baja. Cuando llega la hora de cantar el feliz cumpleaños, la hermana menor se pone frente al pastel con su brillante corona y su vestido de princesa, mientras las velas con forma del numero 5 iluminan su sonriente rostro.
Todos se reúnen para este canto por la tarde de un sábado soleado de primavera, todos dejaron de lado sus acciones y diferencias para poder festejar un año más de vida de ella. Cuando faltan horas para que la fiesta termine, la vecina chismosa da una última ojeada al baño y escucha los comentarios y detalles del acontecimiento. Cuando los tíos ya dejaron de agarrarle las orejas y los cachetes ya rojos a la cumpleañera, todos se retiran y termina el día.


Otra de nuestras actividades consistió en pensar las historias, en reflexionar sobre qué hace que una buena historia sea contable y contable hasta el cansancio, en dar vueltas y vueltas alrededor del enigma de aquello que es digno de ser contado y escuchado:

'Destellos'
por Camila Reyna

En mi casa, a veces, en la ventana, se ve el arco iris. En la escuela, en el patio, algunos días, se ven animales salvajes corriendo.
En la calle, la otra vez, vi pasar a un perrito con sus críos.
La otra vez, salí a la calle y me encontré un gatito siamés.
Hace un tiempo salí de mi casa y había perritos abandonados, me los llevé y los regalé.
Ayer caía granizo fuertemente por la zona de Balvanera y yo estaba ahí, vi un auto romperse todo por las piedritas congeladas que caían.
Otro día, estaba aburrida y empecé a armar artesanías.
Hace un tiempo se me cayó una piedrita en la cabeza y me desmayé.
Cuando era chiquita jugaba con las muñecas todo el tiempo.
Hoy a la mañana encontré a un grupo de personas repartiendo comida por la calle.
Hace unos días me caí y me golpeé el brazo. En unos días voy a tener un león. Hace un tiempo me encontré 100 pesos en la calle. Me compré un montón de cosas. Pasado mañana voy a salir a un lugar, donde hay tiburones con los que se puede nadar.


En el mes de Junio y Julio estuvimos trabajando la narración desde el punto de vista autobiográfico. En una de nuestras clases tratamos de evocar alguno de nuestros primeros recuerdos.

'Rosas' por Camila Saavedra

Recuerdo la primera vez que empecé a dibujar un poco mejor...
La persona que me ayudaba era mi mamá. A mí me gustaba mucho cómo dibujaba ella. Empecé a dibujar a los 6 años, creo, no estoy muy segura. Porque no tengo mucha memoria, siempre me olvido de todo.
Bueno, mi mamá me enseñó a dibujar rosas, unas muy lindas y sencillas rosas. 
Era un día soleado, lindo para salir a pasear. Pero yo siempre me quedaba en casa. No me gustaba salir. Ese día estaba aburrida, no sabía qué hacer. Vino mi mamá y me trajo una hoja para que dibujara. Yo le decía que no se me ocurría nada, entonces me dijo que mirara cómo ella hacía una rosa. Luego empecé a hacerlas yo. Y me gustó, no podía dejar de hacerlas. Me encantó, hasta el día de hoy sigo haciéndolas. 
Puede que yo también pueda enseñarle a alguien. Tal vez a mi hermanito. :)

'Dulce' por Ana Rojas

Mi primer recuerdo de la niñez ocurre un día con mi papá en un supermercado. 
Habíamos ido a comprar algo para desayunar y él estaba en la caja pagando. Mientras salíamos, estaba entrando un hombre enano. Yo lo señalé y le dije a mi papá que lo mirara. Mi papá se apenó. Creo que le pidió disculpas: yo había gritado duro al verlo. Cuando llegamos a casa mi papá me regañó.
A la mañana siguiente volvimos al supermercado. Estaba el enano. Fui hasta donde estaba él y le pedí perdón. Supongo que me dijo que sí porque me regaló un dulce. 
Después de ese día cada vez que iba al supermercado con mi papá, él me regalaba un dulce.  

'Fuego'
por Quimey Fusaro Fortete

Era una tarde lejana de 2005, todo transcurría con normalidad, hasta que, mientras estaba viendo jugar a mi papá al solitario, un fuerte olor a quemado comenzó a invadir el ambiente. Ese olor provenía de nuestro nuevo lavarropas que se estaba prendiendo fuego. Mi padre salió corriendo al pasillo en busca del extintor que había en él, pero desgraciadamente, estaba vacío. Mientras tanto, mi mamá intentaba desesperadamente apagar el fuego con agua e instantes después mi progenitor volvía con dos matafuegos a por aquel incendio. A mi hermana y a mí nos mandaron a nuestro cuarto con leche y galletitas con forma de animales, hasta que, nos durmiéramos. Pero el tiempo pasó para que aquella cosa que dije se cumpliera finalmente.


‘Avión’ por Evelyn Cisneros

Tenía unos 11 años de edad y el día estaba lluvioso. Ese día iba a ser la primera vez que viajaba en avión. Estaba nerviosa, acompañada por mi mamá y mis hermanos.
 El avión salía muy temprano y yo no había dormido mucho. Estábamos los cuatro esperando y como estaba demorado aprovechábamos para desayunar. Después anunciaron que el avión estaba cancelado, y tuvimos que ir a buscar el equipaje y volver al otro día.
 Fuimos al aeropuerto y esta vez nuestro avión salió a horario. Subimos y tuvimos que esperar un poco para que despegara. Cuando despegó no se sintió mucho, el viaje fue rápido y así llegamos a Mendoza.    





En otro de nuestros trabajos autorreferenciales estuvimos tratando de definir algunas pasiones y sentimientos desde una perspectiva personal:

'Miedo' por Quimey Fusaro Fortete

Sacaba a mi perra a pasear como todos los días, pero había algo diferente en ella: estaba en celo. Inquieta, desesperada, mordiendo la correa, hasta que ésta no aguantó más y se rompió. Asustado y desesperado a partes iguales corrí a buscarla, pero ese animal hacía caso omiso a mis intentos, como si se estuviera burlando de mí. 
Toda la persecusión finalizó de una forma lamentable e inesperada, un coche que venía de lado golpeó su mediana cabeza. Ella salió corriendo como si de una bala se tratara. SE fue a la puerta de mi casa cansada y adolorida. Con un trauma que nadie podrá quitarle. 

'Miedo' por Camila Saavedra

Yo tengo miedo a hablarle a la gente, a las personas, no puedo. Siento que si les hablo me van a responder mal, no sé por qué. Presiento eso, muchas veces, con todos. Excepto con mis amigos y mi familia. A los demás no puedo hablarles. Aparte de que soy muy tímida, no puedo. Hasta me da miedo ir a comprar, no me gusta socializar.
Siento que si voy a comprar puede que no vuelva a mi casa. NO me gusta estar sola, ir a lugares sola, prefiero estar con alguien.

'Miedo a crecer, a madurar, a ser grande, etc' por Abigaíl González

No le tengo en realidad miedo a crecer. Pero como no me gusta y no sé en realidad a qué le tengo miedo... nunca me puse a pensar. Debe ser lo más cercano al miedo que tengo.
No me gusta crecer ya que siento que pierdo mi niñez.Tampoco me gustan los cumpleaños, los relaciono con perder un año. Prefiero ser inmadura. No me gusta ver a la gente grande amargada y siento que voy a terminar así. La gente madura no se ve tan divertida. Pienso que cuando yo sea grande voy a ser igual. Los grandes tienen muchas pero muchas responsabilidades. Cuando sos menor no las tenés. También hay gente que empieza a sufrir con los años, a tener muchos problemas. Cuando era chica siempre quería ser grande, pero con la misma inmadurez. NO me refiero a tener la mentalidad de un nene de dos años. Quiero decir que no quiero tener responsabilidades. Tener un hijo, por ejemplo, no te arruina la vida, pero te cambia todo por completo. No sé cómo debe ser, nunca tuve un hijo/a. Pero siempre ver que los padres nunca tienen tiempo para sí mismos. NI para pasar con amigos. Y la verdad que no me gusta. No me agrada ser mayor. No quisiera tener una gran familia. Ni casarme incluso. Eso sí, siempre quise terminar mis estudios y recibir un buen diploma. 
La verdad no tengo idea sobre si estas ideas están bien. Tal vez tengo una forma de pensar mala y rara. Tampoco creo que sea un miedo, pero es lo que más se le parece dentro de las cosas que me pasan.     

'Miedo'
por Claudia Carballo

Desde los 4 o 5 años me agarran ataques mientras duermo. Son sueños que hasta el día de hoy me persiguen. En el sueño me encuentro en el comedor de mi casa a oscuras, sentada en el medio de la habitación con un mueble gigante enfrente de mí. Sólo un mueble.
Comienza apenas me duermo. Puede ser que me levante a mitad de la noche y luego lo vuelva a soñar. Muchas veces me ocurre antes de que suene la alarma de mi celular. Todas esas veces, el mueble se me cae encima y me despierto de golpe.

Por suerte, ahora no me pasa tan seguido como antes.



‘Desobediencia’ por Milagros Orué


Una nena de aproximadamente 10 años, que tenía cierto capricho por la natación y los juegos de agua, estaba disfrutando el verano en la casa de uno de sus primos. Cuando todos estaban en la tranquilidad de la siesta calurosa, esta pequeña traviesa hizo una de las suyas y desobedeció la orden de no salir de la casa. Cuando llegó a la calle, caminó un par de cuadras hasta llegar al natatorio barrial, al llegar ahí, no lo pensó dos veces y se sumergió en la soledad de aquella pileta para niños. Entonces apareció aquel insecto que le cambiaría la manera de ver esa especie, esa pequeña araña, que le recordaba a una mascota que tenía su primo lejano, estaba caminando por el borde de la pileta justo al mismo tiempo en el que la traviesa se sienta en ese lugar. Para cuando se percató de la presencia de aquella especie en el borde de su mano ya era tarde. Una molestia que provenía de su dedo índice hizo que esa tarde de diversión terminara en el hospital con la mano completamente inflamada y morada. Desde ese día esa niña odia, teme y se asquea con las arañas. Es solo uno de sus miedos


En una de nuestras clases del mes de Junio trabajamos la descripción física y psicológica de personas o personajes. He aquí algunos de nuestros trabajos:

'Quimey' por Jazmín Jara:


Él es una persona muy sencilla. A pesar de tener muchos problemas, siempre es muy bueno y educado. Es un chico muy estudioso, tranquilo, su mirada te transmite confianza y tranquilidad. No le gustan los problemas, antes de tener uno prefiere quedarse en silencio. 
Su aspecto físico es medio, es decir, ni muy delgado ni sobrepasado de epso. Su color de piel es un tono crema, sus cejas, negras, igual que su cabello y sus ojos. Su sonrisa es como todas: linda y sencilla. Pero él es diferente, no sonríe con cualquiera. Su tono de voz es grave cuando la levanta pero casi siempre habla bajito, sin necesidad de que alguien lo escuche, en pocas palabras, él no es de llamar la atención, no le gusta. Su forma de caminar es pausada, sin apuros, como si tuviese todo el tiempo del mundo para llegar a destino. Su personalidad y carácter son muy beunos, sólo que a veces es muy tímido y no socializa con nadie. 
  

'Luz' por Ana Rojas

Luz es chiquita, de pelo semilargo, no muy corto, no muy largo. Siempre usa una balaca con orejas de gato azules, tiene el cabello morado, que antes era azul. Sus ojos son negros, la piel, morena.
Es muy tierna y sentimental. 
Casi nunca se pinta las uñas. 
Es delgada y un poquito solitaria. 
Generalmente está concentrada, es muy atenta. 
Tiene unas pestañas largas, uñas cortas, las cejas, tupidas, unas manos pequeñitas, ojos grandes. Creo que le gusta mucho el color aunque ella no siemore viste muy colorida.
Tiene una voz muy dulce y es algo tímida. Camina despacio. Habla muy poquito con los demás. 
Casi siempre está escuchando música.
Me parece que es una niña fuera de lo común. Me cae demasiado bien. Es muy linda.

'Karen' por Milagros Orué

Esta chica, además de ser una perosna que mide poco más de 1,60 y llega a pesar no más de ciencuenta y algo de kilos, tiene una personalidad muy particular, con cabello rojo y gastado por el cambio de tinturas y decolorantes. Se viste normalmente de colores oscuros y siempre con todos y cada uno de sus collares. Me atrevería a decir que es una persona muy solitaria cuando está triste. Con la sonrisa de nena que saca cada vez que puede cualquiera de corazón frío se enemora. Sinceramente, es una de esas personas que tiene el don de ver el mundo de manera distinta. Te hace pensar con simples palabras. NO deja que las cicatrices que lleva en su historia la afecten. Es la persona más honesta que conozco. 

'Camila Reyna' por Quimey Fusaro Fortete

Camila Reyna tiene piel blanca con ligeras manchas de color rojo claro.Posee un pelo castaño corto y ojos marrones oscurecidos por una mirada fuerte. Sus labios son color rojo claro, acompañados de unos dientes de apariencia resistenet, blancos como la crema, las encías resaltan por la limpieza y salubridad.
Se ven esbeltos sus brazos, el torso delgado e imponente, con un saco que combina de forma homogénea diferentes escalas de grises con un corazón en el centro del torso.
También tiene una armónicamente mediana cintura, delgadas piernas que resaltan fuerza y estabilidad. Todo esto cubierto por un pantalón de jean y unas preciosas zapatillas. 


...en relación a la lectura de Páginas mezcladas, la novela de Pablo De Santis (TP N° 14, 14 de Junio) surgió el siguiente texto:

Posible final para Yves Montaner por Camila Reyna:

El detective Yves Montaner, luego de hacer descubierto al asesino, continuó interesándose en otros casos, que por fortuna logró resolver. 
Tras años de trabajar como investigador, se dio cuenta de que jamás había tenido una vida normal. Desde pequeño había querido ser detective. Toda su vida estudió y estudió. Pero...
Pero ahora mira su situación: está conviviendo con 14 hombras y únicamente tienen una persona que los ayuda. 
Ahora se está dando cuenta de que a los 35 años ni siquiera tiene un hijo. 
Entonces decide dejar su carrera por un tiempo, quiere dedicarse a construir su vida. 
A pesar de tener la edad que tiene, aún tiene esperanzas de poder formar una familia. Sueña con contarle a sus hijos todas sus aventuras como detective. 


Trabajos de los alumnos de 3ro 5ta


... a partir del trabajo de fragmentos de Diario de Adán y Eva  de Mark Twain han surgido los siguientes textos en 3ro 5ta

MONÓLOGO DE ADÁN (TP n°10)

Por Brian Páez Reyes:

Hoy es un nuevo día, desperté y noté que el cielo estaba obscuro y cubierto de algo gris medio blanco, , ok, voy a comenzar a ponerle nombre a los animales.
Hace frío pero nada va a detener mi trabajo. Esto me da un poco de miedo: ruidos muy fuertes se escuchan en el cielo, más fuertes que los de un grito o rugido y ahora cae agua del cielo, el fuerte sonido sigue apareciendo cada tanto. Me refugié en una cueva, ¡un frío tengo!¡estoy re mojado! Sh sh sh sh, se escuha fuera de la cueva mientras el agua cae del cielo. Lluvia le voy a decir a este extraño suceso de que el agua cae del cielo.
Me quedé dormido y la lluvia ya se acabó. Salgo y me encuentro con todo el jardín lleno de pequeñas lagunas, la tierra toda mojada, blandita, resbalosa, casi me caigo al caminar. Por lo menos hoy apareció el sol y esa cosa gris es fue del cielo. Qué cosa interesante lo que hace la lluvia. Bueno, mejor me voy a comer algo y después a trabajar. 



Por Tomás Piñeiro:

Acabo de llegar a la tierra. Todo es tan tranquilo, tan… qué linda es la sensación de tocar el suelo con los pies.
Acabo de llegar y lo que más me extraña es saber qué hago yo acá, por qué estoy yo solo, junto a tantos animales, algunos tan tiernos, tan buenos, tan felices y otros tan malvados como ese bicho que vuela. Me encantaría ponerle un nombre, a partir de ahora te vas a llamar ‘abeja’, espero no verte tan seguido por acá, no quiero que me piques de nuevo.
Otra cosa muy rara que noté al llegar es esa esfera roja que me ilumina. Al pasar el tiempo este día se va poniendo oscuro, quiero seguir explorando, pero al parecer no voy a poder ya que tengo mucho sueño y no veo nada a mi alrededor.

Al despertar me sentí más raro aún, nunca había escuchado tantos sonidos, tampoco imaginé esta tranquilidad, creo que voy a poder acostumbrarme a esto de estar solo junto a esta cantidad de naturaleza. 


por Nahuel Cari

MI PRIMER DÍA en la tierra prometida... Dios, mi Creador, me ha dicho que soy la primera criatura llamada 'ser humano' que pisa este lugar y me ha llamado, además, Adán.

Mi propósito es aún desconocido, así que voy a tardar en encontrarlo. 

Mientras vago por estas bellas tierras, contemplo cada cosa que veo, criaturas muy diferentes a mí,terrenos rocosos, árboles, agua... todo me parece extraordinario. Entonces me vuelvo a preguntar: -¿qué hago aquí?-, miro al cielo, a las nubes, al sol... esperando una señal, una respuesta.

Hace exactamente 5 horas soy consciente de lo que ocurre a mi alrededor y entonces siento una sensación molesta dentro de mi estómago y la boca seca, recuerdo así las palabras de mi creador: -Adán, en tu vida vas a tener necesidades, y vas a tener que hallar la forma de satisfacerlas-. Inmediatamente recordé cómo una de las pequeñas criaturas trepaba a un árbol en busca de lo que parecía ser un alimento, una fruta. 

Busqué algún árbol que tuviera una de esas frutas pero no encontré ninguno. Caminé y caminé, a tal punto que no podía más, entonces lo vi, un gran árbol muy distinto a los que ya había visto, poseía muchos frutos color rojo. Casi sin pensarlo lo trepé, sentí el viento, la brisa golpear en mi cuerpo, mi cara, como si buscara detenerme. En ese momento surgió él, mi creador, entre las nubes, por primera vez experimenté el temor, se lo veía furioso, yo no entendía qué estaba sucediendo. Me explicó que la fruta que estaba por ingerir era una fruta prohibida, bajo ninguna circunstancia debía comerla. Le hice caso y bajé del árbol. Por mi obediencia mi creador me obsequió fruta y algo que no tenía idea de que era alimento, carne. Finalmente me explicó cómo saciar el hambre y la sed. Pero mi propósito en estas tierras es aún desconocido. Ahora no me queda más que seguir explorando este lugar y esperar que algún día llegue mi propósito.   


...a partir de la lectura de El siglo XX de Marcelo Birmajer, surgieron los siguientes textos:

de AGUSTÍN GORNO, en relación con el T.P. N° 1:

  Al despertar, decidí que el mejor lugar era mi cama. Mis sueños eran oscuros pero peor aún era lo que me aguardaba fuera. Hoy cumplo 13 años y debo matar a mi mascota, mi chivo Juan. ¿Por qué elegí ese nombre? Si desde el principio sabíamos que iba a morir, qué sentido tiene. En realidad, nada lo tiene porque todas las vidas acabarán algún día. Supongo que sólo lo bauticé así por lo gracioso de su nombre. Igual de gracioso me resulta el siglo XX.

  "Es muy simple", me dije a mí mismo, "me quedaré en la cama por siempre". Por fuera el cielo seguía oscuro, pensé en lavarme la cara contra el río para expiar mis sueños. Las mujeres son incapaces de dejarlos atrás, por más que se laven la cara una y otra vez, son misteriosas. 
  Tomé mi cuchillo, finalmente, y salí hacia la cabaña donde estaba mi chivo. Según el ritual nadie debía verme, yo debía ser invisible. Pero accidentalmente Giga, la mujer, me vio, giró la cabeza y pretendió ignorarme. 
  El sol, los insectos y los árboles me molestaban: no podía dejar de sentirme mal ni de pensar: "¿qué hacía Giga ahí? y ¿por qué me importaba?". Todo empeoró cuando descubrí que la cuerda que sostenía a Juan había sido cortada y el animal escapado. Sin perder un segundo, dejé un pequeño aviso a mis padres con una rama como señal y salí al bosque a buscarlo para encontrarlo finalmente despedazado por un oso. 
  Me acerqué a los restos para extraer la campanilla que me había regalado mi bisabuelo, sentí furia, luego tristeza y desesperación, para acabar sintiendo tan sólo indiferencia. 

  Ni mi destino ni mi vida me importaban, hasta que sentí unas suaves pisadas. Era Giga, venía a cumplir la misión de ayudarme, eso le permitiría convertirse en mujer. Me negué a volver con ella. Tenía que encontrar una solución.